
Por supuestas “cuentas pendientes con las Farc-EP” fueron asesinados cinco campesinos en la zona rural de San Vicente del Caguán en el departamento de Caquetá. Los cinco hombres, tres de ellos integrantes de una familia, y dos trabajadores de la zona, estaban desaparecidos desde días atrás.
La masacre se atribuye inicialmente a las disidencia de las FARC, pues en el lugar se encontró un panfleto señalando que los asesinados estaban en la mira de esa organización al margen de la ley. "Estos hombres fueron ajusticiados por cuentas pendientes con las Farc-EP", se leía en el panfleto.
La Fiscalía anunció que personal de esa institución asumirá la investigación mientras los cuerpos fueron trasladados a las instalaciones de Medicina Legal en San Vicente del Caguán.
El comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta Omega, general Raúl Flórez, dijo que "en esa zona fue donde abandonaron los cuerpos. No hay certeza del sitio donde los pudieron haber ultimado".
El alcalde de Julián Perdomo, informó que "se presentó una masacre, desafortunadamente asesinaron a cinco personas, campesinos en la vereda La Sierra, que está ubicada a hora y medio de San Vicente del Caguán.
“Como Alcalde de este municipio rechazo contundentemente estos actos de violencia que generan dolor e incertidumbre y como Alcalde defiendo la vida de nuestros campesinos", dijo Perdomo.
Por su parte el gobernador del Caquetá, Arnulfo Gasca, enfatizó a los grupos armados ilegales que operan en esta región del país que "en el departamento queremos vivir en paz y que rechazamos todos estos actos de violencia”.
Las víctimas eran todas hombres, que fueron atacados por varios sujetos armados en lo que constituye la masacre número 45 de Colombia en lo que va de año, donde han sido asesinados 164 líderes y dirigentes sociales, según reseñó Indepaz.